La foto que hoy os traigo se ha convertido desde el pasado día 30 de junio en una de mis favoritas. Se trata de la repetición de un encuadre realizado hace más de un año en Piquillo, Ontón. Si en aquella ocasión la foto me encantó, esta vez me ha encandilado…
Creo que es por la luz captada, pero no me atrevo a aseverarlo. La cosa es que esta toma me ha entusiasmado desde el primer momento y una vez revelada a gran tamaño, todavía me gusta más.
La realicé con el Sigma 10-20 a f11 y con trece segundos de exposición a ISO 100, con trípode y nivel de burbuja. Se conoce que no me fijé demasiado en la indicación del nivel porque posteriormente le he tenido que corregir levemente la inclinación. Para compensar la luz del cielo utilicé dos filtros degradados neutros.
Ahora no tengo tiempo para escribir mucho más. Os dejo con la foto y si acaso esta noche os cuento algo más. Tengo alguna noticia grata que contaros. Laster arte!
